Visitar un hotel de hielo es una experiencia única que se puede disfrutar en Laponia. Estas construcciones efímeras, hechas enteramente de hielo y nieve, ofrecen habitaciones temáticas, esculturas y bares donde se sirven bebidas en vasos de hielo. Los visitantes pueden recorrer las instalaciones, admirar el arte efímero y, para los más aventureros, incluso pasar una noche en una habitación de hielo, equipados con sacos de dormir térmicos. Es una forma fascinante de apreciar el ingenio humano y la belleza del invierno ártico.
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